miércoles, 4 de febrero de 2009

Los judíos alemanes exigen una rectificación papal mas allá de las disculpas

La presidenta del Consejo Central de los Judíos en Alemania, Charlotte Knobloch, exigió hoy del Vaticano una rectificación 'mas allá de un distanciamiento o disculpas' por la polémica surgida tras la rehabilitación de cuatro obispos 'lefrebvrianos'.


Knobloch subrayó que esperara que 'el Vaticano saque consecuencias concretas de los terribles incidentes en torno a la Hermandad de Pío mas allá de un distanciamiento o de pedir disculpas'.

'No se trata de que se hayan cometido errores, sino de que estos sean corregidos', afirmó la máxima representante de los judíos alemanes, para quien no se trata tampoco de que el Vaticano se disculpe por las declaraciones de lo que llama un antisemita convencido.

A su juicio, la Iglesia católica no debe 'admitir en sus filas a quienes rechazan de plano el diálogo con los judíos, les califica de asesinos de Dios y niegan el Holocausto'.

'El Papa todavía no ha dejado claro que le resulta más importante, si el diálogo con el judaísmo o un acercamiento a la Hermandad de Pío, que rechaza la reconciliación con el judaísmo y el diálogo con otras religiones', dijo Knobloch en Múnich, tras destacar que el asunto no está zanjado aún.

Mientras tanto, el obispo de Ratisbona, Gerhard-Ludwig Müller, ha calificado la polémica de 'campaña' contra el Papa Benedicto XVI, quien, según afirma, desconocía que el obispo británico 'lefrebvriano' Richard Williamson hubiese hecho unas declaraciones antisemitas cuando decidió rehabilitar a los cuatro obispos.

Tras calificar de 'idiota' la negación del Holocausto, Müller señaló hoy en declaraciones televisivas que Williamson 'ha dañado de manera terrible a la Iglesia y engañado al Papa, que no ha cometido errores personales ni tiene motivos para disculparse'.

A su vez, el arzobispo de Berlín, Georg Sterzinsky, ha reclamado del Papa que revise su decisión de levantar la excomunión y readmitir en el seno de la iglesia a los cuatro obispos seguidores del fallecido religioso ultraconservador Marcel Lfevre.

'Hay que corregir las cosas', señaló el arzobispo de Berlín, partidario también, si se han cometido errores, de pedir disculpas 'da igual a que nivel'.

Un día después de que la canciller Angela Merkel criticara al Vaticano, el presidente del gubernamental Partido Socialdemócrata (SPD), Franz Müntefering, calificó de 'inaceptable' la rehabilitación de un obispo que niega el Holocausto.

'Considero la rehabilitación de un obispo que niega el Holocausto inaceptable. Se trata de un grave e histórico error que la Iglesia debe corregir cuanto antes', comentó el máximo dirigente del SPD.

Mientras tanto, el profesor de Teología de la Universidad de Tubinga Michael Theobald propuso hoy que, al igual que en el derecho penal alemán, la negación del Holocausto debe sea tipificada como delito en el derecho canónico.

'Un obispo que niega el Holocausto abandona por si solo la comunión de la Iglesia. Su excomunión es obligatoria', afirma Theobald en declaraciones al rotativo 'Passauer Neuen Presse'.

Además exige que los juristas de la Iglesia Católica trabajen con urgencia en ampliar la legislación canónica con un artículo que contemple ese supuesto.

En defensa del Papa y el vaticano salió hoy el obispo de Eichstatt, Gregor María Hanke, quien criticó a Merkel por su intervención del martes.

'Resulta incomprensible e indignante que hasta la propia Canciller exija del Papa palabras claras en relación con algo en lo que el Papa nunca ha dejado un lugar a la duda', dijo Hanke.