viernes, 5 de diciembre de 2008

Varios países europeos se quedan sin el vino de Belén para la misa de Navidad


Cinco países europeos se quedarán este año sin vino elaborado en Belén para sus misas de Navidad por trabas impuestas por Israel.

"Este año no hemos podido exportar nuestro vino a ninguno de los países europeos de los que hemos recibido pedidos: Alemania, Reino Unido, Irlanda, Italia y Rumanía", dijo a Efe Amer Kardosh, director de exportación del Monasterio salesiano de Cremisán (en Belén), que produce el único vino elaborado en Tierra Santa.
Según Kardosh, desde hace meses el Ejército israelí les deniega o pospone los permisos para exportar su producto estrella, el vino de misa, que cobra especial significado para el sacramento de la comunión durante las celebraciones de Navidad, como la tradicional Misa del Gallo.
"Esta semana me han comunicado que nos dejarán sacar el vino, pero ya es demasiado tarde para llevarlo a Europa", un proceso que lleva por lo menos un mes, explica el responsable, que añade que se sentirá satisfecho si consigue al menos llevar el vino a las localidades con población cristiana de Israel, como Nazaret y la región de la Galilea.
Desde el comienzo de la Segunda Intifada (en el 2000), las trabas a la entrada y salida de productos de los territorios palestinos, la limitación de movimientos y el muro de separación construido por Israel dificultan enormemente la producción vinícola del Monasterio de Cremisán, donde monjes italianos elaboran vino desde 1985.
Su bodega tiene una gran demanda entre las comunidades cristianas tanto en Israel y los territorios palestinos como en el exterior, pero no puede atenderla por las dificultades para la recepción de materias primas y la distribución de sus productos.
La ciudad cisjordana de Belén se encuentra rodeada por el muro de separación israelí, que afecta también al turismo, la agricultura y ganadería en una zona sin apenas tejido industrial.
El producto más demandado de Cremisán es su vino de misa, pero también producen otros vinos como el Merlot, Cabernet, Riesling, Chardonnay, Malvasia, que ostentan orgullosos en su etiqueta la denominación de origen en "Tierra Santa".