viernes, 5 de diciembre de 2008

Por primera vez en años: en Israel hay menos pobres

Las mediciones son anteriores a la crisis

No todas son malas noticias. Por primera vez en diez años, el informe de pobreza anual dado a conocer por el Seguro Nacional (Bitúaj Leumí) indica que el fenómeno se ha reducido en Israel en el año 2007. Quizás más correcto sería decir que se había reducido, porque el informe no incluye los efectos de la presente crisis.
En 2007 el número de pobres según el informe fue de 1.630.400 personas, en lugar de las 1.674.800 del año anterior. Ello significa que el porcentaje de pobreza descendió del 24,5% al 23,8%. Si bien se trata de una muy leve mejoría, es una buena noticia si se tiene en cuenta que durante los últimos diez años la situación siempre empeoraba. La institución autora del informe aporta que la mejoría se debe al aumento del número de empleados y del aumento salarial registrado durante el transcurso de 2007.
Por primera vez desde hace muchos años se ha registrado también un descenso en el número de niños por debajo del nivel de pobreza, del 35,8% en 2006 a 34,2% en 2007. De todas maneras se trata de 774.000 niños pobres, frente a 804.000 del año anterior. En cambio, aumentó el porcentaje de ancianos pobres, de 21,5% a 22,6 por ciento.
El porcentaje de familias pobres descendió muy levemente, de 20% a 19,9% y eran 412.900. Descendió también el número de hogares pobres que tienen uno o dos aportes de salario, del 12,4% del total al 12,2 por ciento. La línea de pobreza para una familia de dos personas fue de 3.350 shékels mensuales, para una familia de cuatro 5.350, y una de seis 7.100 shékels.
La pobreza se mide en Israel en forma comparativa y no absoluta. Para definir la línea de pobreza se calcula el sueldo medio, una línea imaginaria de ingresos que divide a la población en dos mitades: los que ganan más que eso y los que ganan menos. La mitad de esa suma como ingreso mensual, es considerada línea de pobreza: el que gana por debajo de ella es ``oficialmente'' pobre. De ello surge que cuando los ingresos aumentan para los más ricos, automáticamente hay más pobres en Israel.